En febrero, Andorra organizará una prueba de la Copa del Mundo de esquí alpino, concretamente entre el 25 y el 28 de febrero del 2016, ya que la estación de Grandvalira ha obtenido el beneplácito de la Federación Internacional de Esquí (FIS) y todas las estrellas mundiales de este deporte se darán cita en los Pirineos. Además, en julio el Tour de Francia estará tres días en el país, con la principal etapa pirenaica. En este caso, la situación es más ambigua porque la carrera está organizada por una entidad francesa y debería estipularse si le acepta la sanción a un territorio de paso.
En cualquier caso, las autoridades andorranas tienen que adaptarse con rapidez para no tener ningún sobresalto. La suspensión se ha producido durante la reunión del Consejo Fundador de la AMA, que se ha celebrado en Colorado Spring (EEUU). El suspenso más sonado ha sido el de la agencia rusa, la RUSADA, debido al escándalo de dopaje en el atletismo de aquel país. Esta suspensión también deja provisionalmente en el aire la organización del Mundial de Fútbol del 2018.
Otros países que también han visto la mano dura de la AMA y están en las mismas condiciones de suspensión que Rusia y Andorra han sido Argentina, Bolivia, Ucrania acusadas de usar laboratorios no acreditados para analizar muestras de sangre y orina, mientras que Israel, al igual que Andorra, está por no haber adaptado sus normativas al Código Mundial Antidopaje. Asimismo los cinco países de Brasil (con los Juegos de Río), Bélgica, Francia, Grecia, México y España, están "bajo vigilancia", en este caso porque deben acabar de adaptarse a las últimas normas internacionales. En este caso tienen tiempo hasta el 18 de marzo.
Fuente: