Batió todos los récords en la Copa del Mundo hace dos años y, tras ganar dos platas en los Juegos de Vancouver 2010 (Canadá), salió de los de Sochi’14 (Rusia) con dos oros. ¿Cómo consiguió mantener la motivación para repetir otra sensacional temporada?
La motivación es muy difícil de mantener durante tantos años, no es fácil presionarte a ti misma cada día. Así que después de la temporada anterior, cambié mi enfoque. Decidí que no todo iba a ser esquiar y esquiar. Empecé a estudiar una carrera universitaria, la de pedagogía, en Maribor (Eslovenia). Comencé a construir otra parte de mi vida. Cuando sea maestra, podré enseñar cosas a los jóvenes.
Esa decisión me ayudó a airear mi mente, al no estar centrada únicamente en el esquí. Estuve dos meses estudiando y luego volví a los entrenamientos. Eso fue muy importante. Pude volver a trabajar a tope y rendí de nuevo al cien por cien.
Esa decisión me ayudó a airear mi mente, al no estar centrada únicamente en el esquí. Estuve dos meses estudiando y luego volví a los entrenamientos. Eso fue muy importante. Pude volver a trabajar a tope y rendí de nuevo al cien por cien.
Perdió la Copa del Mundo por muy pocos puntos frente a la austriaca Anna Fenninger. Siendo una perfeccionista, ¿aún le molestó no haberla ganado, a pesar de completar otra sensacional temporada?
Está claro que cuando se te escapa justo al final, es posible que te enfades un poco. Pero en el momento que te das cuenta que lo has dado todo, te sientes muy feliz. Me superó una gran deportista, como Anna, contra la que luché a tope hasta el final. No estuvo mal.
¿Dónde y cuándo cree que se le escapó la Copa del Mundo?
Quizá en Maribor. Perdí dos buenas ocasiones, en esas dos carreras. Pero no sólo ahí. Hubo otros fines de semana en los que no estuve tan bien y no pude mantener el ritmo del principio de la temporada. No obstante, fue un año interesante y no creo que ‘perdiera’ la Copa, porque la luché hasta el final. Fue una gran batalla entre Anna y yo, algo muy bonito para el esquí y el deporte.
¿Cuál ha sido el mejor momento de su carrera deportiva?
Las dos medallas de oro que gané en (los Juegos Olímpicos de) Sochi. En especial, el oro del descenso, que compartí con (la suiza) Dominique (Gisin). Creo que ése en concreto fue el momento más especial de mi carrera, porque nos pudo hacer muy felices a dos personas a la vez. Aunque hay uno aún más curioso. La primera de mis 26 victorias en Copa del Mundo, en el gigante de Soelden (Austria), en 2002, fue un triple empate con la noruega Andrine Flemmen y la austriaca Nicole Hosp. Esa también fue una sensación muy especial, claro. Que en esquí haya tres deportistas marcando exactamente el mismo tiempo es una locura. De todas formas, compartir victoria en una Copa del Mundo no es lo mismo que hacerlo en unos Juegos Olímpicos.
¿Y cuál ha sido el peor?
Para mí fue hace seis años, cuando estuve a punto de retirarme. No tuve una gran temporada y sólo aspiraba a terminar las carreras en una pieza, sin lesionarme. Después de eso, entendí que cada revés en la vida te puede aportar más que cualquier triunfo.
Está claro que ésa, la de seguir compitiendo, fue la mejor decisión que tomó en su carrera deportiva, ¿no? A partir de ahí empezó a mejorar y acabó ganándolo todo.
Sí, es cierto. Si no hubiese decidido seguir, no hubiera ganado todas estas medallas. Pensándolo ahora mismo, echando la vista atrás, la verdad es que hubiese sido muy triste.
Ha ganado en todas las disciplinas. ¿Cuál es la más difícil?
Para mí, que hago todas, la más dura es el eslalon. Sin duda.
Su carrera es para sentirse muy orgullosa. Se convirtió, también, en la mejor deportista de todos los tiempos de su país. Motivo añadido de orgullo, más cuando el comienzo fue duro, ¿no?
Sí, sin duda. La historia es muy larga. Porque no es sólo una historia de ganar en el deporte. Es de ganar en la vida: no sólo en las carreras. Hay muchas cosas detrás. Ganamos cada uno de los días que vinieron. Es una historia bonita, al final. Pero muy larga.
Comencé a esquiar con la federación, pero acabé formando mi propio equipo. No fue fácil, pero acabamos haciendo algo muy grande, después de estar a punto de dejarlo, hace seis años, como dije. Con Andrea (Massi, italiano, su técnico y pareja) decidimos hacer un cambio importante y creamos ese equipo privado. Desde entonces, gané trece medallas en Mundiales y Juegos Olímpicos. Fue un cambio enorme para mi. Y estoy agradecida por todo lo que me sobrevino después.
Comencé a esquiar con la federación, pero acabé formando mi propio equipo. No fue fácil, pero acabamos haciendo algo muy grande, después de estar a punto de dejarlo, hace seis años, como dije. Con Andrea (Massi, italiano, su técnico y pareja) decidimos hacer un cambio importante y creamos ese equipo privado. Desde entonces, gané trece medallas en Mundiales y Juegos Olímpicos. Fue un cambio enorme para mi. Y estoy agradecida por todo lo que me sobrevino después.
¿Aún está motivada para seguir intentando ganar cosas?
Siempre puedes encontrar motivación. Pero con el paso de los años cada vez es más duro recuperarla. Por eso necesito relajarme un rato, después de haber acabado la temporada; y después pensar cómo seguir en el futuro. Pero creo que mi carrera ha sido realmente exitosa y podría acabarla ahora.
Aunque tampoco quiero precipitarme en tomar una decisión definitiva. Igual me tomo un tiempo de descanso y luego regreso… no lo sé. Ya veremos. Todo es posible
Aunque tampoco quiero precipitarme en tomar una decisión definitiva. Igual me tomo un tiempo de descanso y luego regreso… no lo sé. Ya veremos. Todo es posible
Has compartido entrenamientos al principio de tu carrera deportiva con Rienda, la española con más victorias en Copa del Mundo.
Sí, entrenamos cuando era más joven. Tengo muy buenos recuerdos de María José y de Carolina Ruiz (única española que ha ganado un descenso de la Copa del Mundo: el de Meribel, en Francia), también. Tengo muy buena relación con ambas, sobre todo durante estos últimos años estreché mucho mi relación con Carolina, porque su marido, el italiano Andrea Vianello es mi 'skiman'. Estuve en su boda, en Granada. Son muy majos los dos. Y María José también, es un encanto.
Nos encanta España, nos encanta Andalucía. Me encanta la gente española, que es muy abierta. Hay grandes fiestas"
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