Un paso mas para la apertura de Sierra de Béjar-La Covatilla

El Ayuntamiento de Béjar habría recibido durante la jornada de ayer las llaves de las instalaciones de la estación de esquí Sierra de Béjar-La Covatilla, según ha podido saber el periódico El Norte de Castilla. Este hecho se habría producido tras haber finalizado y haber estado de acuerdo con el resultado del inventario de los bienes que hay en la estación de esquí, aunque sin determinar la propiedad de los mismos, la cual, según ha repetido el alcalde Alejo Riñones en numerosas ocasiones, tendrá que ser decidida por un juez en su momento.

Este inventario respondería al acuerdo entre el administrador concursal que está llevando la liquidación de Gecobesa y el Ayuntamiento de Béjar a principios de la semana pasada, según el cual el Consistorio podría hacer uso de los bienes que Gecobesa (que está en proceso de liquidación) tiene en la estación de esquí a cambio de una cuantía de dinero y siempre después de hacer un inventario sobre el cual las partes estuvieran de acuerdo.

La cuantía económica para el uso de dichos bienes toda la temporada sería de 160.000 euros, además de una variable en función de los beneficios. De este importe el primer pago de 60.000 euros debería hacerse al firmarse dicho contrato, por lo que se espera se haga efectivo en breve.

De confirmarse de manera oficial, la recepción de las llaves sería la mejor noticia que, hasta ahora, habría recibido el Ayuntamiento en relación con la estación de esquí Sierra de Béjar-La Covatilla, puesto que le permitiría estar un paso más cerca de la apertura de la misma esta temporada, lo cual, según ha expresado el primer edil en numerosas ocasiones, es la prioridad principal del Ayuntamiento, tanto por la repercusión económica que la estación tiene en Béjar y su comarca como por evitar que las instalaciones se deterioren si están sin usarse toda la temporada.

Además, con las llaves en la mano el Ayuntamiento de Béjar podría empezar ya mismo a hacer las tareas de mantenimiento necesarias, así como a pasar todas las inspecciones pertinentes, que le permitan abrir próximamente; unas tareas que habitualmente se llevaban a cabo durante los meses de verano pero que, en esta ocasión y teniendo en cuenta los procesos legales abiertos, se tendrá que hacer a partir de ahora y con el tiempo y la climatología jugando en su contra.