El señor del telesilla

Hace 70 años Bob Burns construyó un telesilla en la ciudad de Park City, y en lo que hoy es Deer Valley. Su nieto hoy trabaja en esa estación, pero no porque haya heredado el puesto, sino por una serie de casualidades que le ha llevado al lugar que fundó su abuelo, y junto al telesilla que la estación puso en honor de los pioneros de la industria del esquí de la zona.

En el año 1946 el país estaba empezando a tratar de romper la crisis económica tras la recién acabada Segunda Guerra Mundial. Muchos eran los que arrancaban negocios para salir adelante, y este era el caso de Bob Burns y Otto Carpenter, quien viendo la pujanza del esquí en el país, decidieron montar un telesilla a las afueras de Park City. Ambos hombres se conocían de la empresa de Minas de Park City, y les encantaba esquiar pero no viajar. En aquel entonces solo había remontes en Snowbasin, Alta y Brighton, todos ellos a varias horas de distancia.

Así que decidieron montar un remonte en la montaña que había detrás de casa. En lugar de pedir un telesilla a Suiza, decidieron construir el suyo propio. Talaron pinos, montaron las pilonas y hasta las sillas. Para mover aquello, un motor de un Ford Modelo A. Ya puestos construyeron un telesquí y mas tarde otro telesilla hacia una zona donde había habido una estación de esquí, pero los trabajadores la desmontaron como protesta durante la crisis económica de los '30.

La estación se llamó Snow Park Ski Club, y abría cada fin de semana. Construyeron también un edificio de 800 metros cuadrados donde se encontraba un bar donde las mujeres de ambos hombres hacían hamburguesas, y según la prensa de entonces, el mejor chili con patatas del país.

Y así estuvieron durante 23 inviernos, hasta que en 1969 les expiró el contrato de arrendamiento de la montaña. Por aquel entonces los remontes estaban muy mal ,y necesitaban de una modernización que no podían asumir los dos hombres, y se cerró. Hasta que en la temporada 1981-82 el comerciante Edgard Stern, la abrió de nuevo bajo el nombre de Deer Valley. Los dos primeros remontes los colocó a unos 100 metros de donde Bob Burns y Otto Carpenter habían colocado los suyos en 1946, y los bautizó con el nombre de estos dos pioneros.

En ese momento aparece Roger Burns, que empezó a trabajar como ayudante de camarero en la estación después de graduarse en la Universidad. Estuvo poco tiempo, ya que se fue a Argentina a vivir unos años, y después regresó a la misma estación ya como auxiliar del departamento de servicio al cliente. Hoy, a sus 48 años es el responsable de ese departamento.