Siempre forfait de día. Como mucho de varios días. No hay nada peor que planear un viaje a otra estación y dejar en el cajón el forfait de temporada de esa estación en la que esquías habitualmente sin usar... es como quemar dos billetes de 20 y uno de diez... ¡cada día que no estás!
Antes aún podías trampear, si te ibas a otro lado, podías hacer un favor y pasarselo a alguien quien no tuviera y lo aprovechara, pero hoy en día, con los medios electrónicos de que disponen en las estaciones, no subirás dos veces sin que te saque los colores cualquiera de las chicas que van con el ipad y controlan la cola.
Además, por mucho que digáis, un forfait de temporada te ata. Te sujeta a la estación que has escogido, quieras o no, tanto como si hay nieve como si no, tanto si hace frío como calor. Sin la atadura de un forfait de temporada puedes decidir irte a otra estación donde haya más nieve, o simplemente por el placer de conocer sitios nuevos o variar de vez en cuando de montañas. Las temporadas que no he cogido el forfait de temporada he podido visitar a diferentes amigos en diferentes estaciones de la geografía sin preocuparme para nada de perder días de "mi forfait".
Y no vale la excusa esa de que si tengo el de "tempo" me obligo más a subir y esquiar. Esquío siempre que puedo y nada me obliga a ello. Voy por gusto.
Si quieres ver la opinión contraria, haz click en el link Forfait de temporada si por It's a Powder day.
