Se acabó de esta manera buscar ese sitio perfecto en el que puedes vigilar tus esquís a través de la ventana mientras le hincas el diente a una hamburguesa, e incluso puedes olvidarte directamente de tener que estar pendiente de ellos, lo cual puede ir muy bien para cuando vas por ejemplo al baño. Queda luego a decisión tuya, si sales corriendo con los pantalones a bajo por tus esquís si te los están robando, o te resignas y piensas que mas vale perder las tablas que perder la dignidad dando zancadas por la nieve con los pantalones por las rodillas.
En el mercado se venden esas finas cadenas con candado, pero prácticamente nadie las usa porque ocupan espacio, puedes perder la llave, y porque tampoco roban tanto. Pero siempre hay lugares donde suelen aparecer más los amigos de lo ajeno. Allí es donde uno deja su material rezando volver a encontrarlo a la vuelta, sobretodo si se trata de una de esos esquís nuevos último modelo.
Lo que AlpineTec propone es una alarma antirrobo que consta de dos partes, a la que han bautizado como AlpineHawk. Avisa cuando los esquís se mueven, pero para evitar falsas alarmas, tiene un acelerómetro (uno para cada esquí, uno solo si es para la tabla de snowboard) que se asegura a las tablas con un producto adhesivo. Si detecta movimientos entonces emite un sonido de 100 dB, suficientes para en teoría asustar al ladrón y hacer que suelte los esquís. Por si acaso, un aviso se te envía a tu smartphone para que salgas corriendo.
Además esta alarma te permite encontrar tus esquis o tabla cuando salen volando en alguna caída y acaban enterrados en nieve polvo. Hay otro sistema parecido, llamado Retriever, pero en el caso de AlpineHawk es un sistema extra al del antirrobo. Para este caso se ha de activar la función "localizar esquís". Entonces se dispara la alarma, y solo tienes que buscarlos guiado por el sonido.
El AlpineHawk no pasa mas de momento que de un proyecto. Por eso se presenta con tuercas para enganchar a la tabla, pero si sale adelante esperan lanzarlo con un adhesivo, tan fuerte como el que fija las GoPro a los cascos, y que no pierda la adherencia con las bajas temperaturas. De hecho todo el aparato está pensado para aguantar hasta -40ºC. Por su parte el peso de la sección que va en el esquí es de 40gramos, suficientes según el equipo de estudiantes de la Universidad que lo está desarrollando, para que no desestabilice el esquí, y un tamaño de 7 x 3 x 3 cm.
En cuanto al hardware, incluirá un chip Bluetooth Low Energy, acelerómetro y alarma de 100 decibelios alimentada por una batería de tipo botón con una vida estimada de tres temporadas de esquí. El radio de acción es de unos 30 metros al aire libre, pero podría reducirse si el propietario entra en algún lugar. De todas maneras la alarma sonará independientemente si el acelerómetro detecta que hay un movimiento largo, así que si el aviso no llega al smartphone, se espera que al menos el amigo de lo ajeno suelte el material.
Si te interesa el producto y quieres colaborar, aquí tienes información mucho mas ampliada y precisa: AlpineHawk en Kickstarter
Fuente: Nevasport Noticias