No eres chileno ¿De dónde vienes?
De una ciudad pequeñita en España llamada Palencia, que no tiene nieve, pero que tiene cerca algunas estaciones como San Isidro o Alto Campoo.
¿Cómo aprendiste a esquiar?
Aprendí como a los 15 años aproximadamente, gracias a una novia que tenía. Los padres de ella no eran adinerados, pero tenían una casa cerca de la estación Alto Campoo, como a 45 minutos más o menos. Ellos cada año iban a esquiar una o dos veces. Así una vez me invitaron a esquiar. Cosa que yo nunca había imaginado. A lo más había ido a la nieve de paseo a jugar . Entre los deportes que hacía no estaba el ski, aunque yo siempre he sido muy deportista. Fue bien gracioso porque yo no tenía skis, ni ropa ni nada. Entonces mi suegra me pasó su “enterito” de color rosa, con unos skis antiguos de ella y unas botas de ski. Fue un verdadero show.
¿No te costó aprender a esquiar a los 15 años?
La verdad no. Tengo habilidades para ciertos deportes y el ski era uno de ellos. Acabé bajando en paralelo por la pista central el primer día. Se me dio bien.
¿Y qué siguió?
Seguí subiendo y practicando con ellos un tiempo, y ya cuando me puse a trabajar pude subir más y así iba progresando también hasta llegar a tener un buen nivel.
¿Cuándo decidiste hacerte instructor?
Tenía 19-20 años, cuando un amigo mío se fue a Granada a probar a La Escuela Internacional de ski. Antes te permitían entrar ahí, si antes hacías un curso de pre-formación. Al segundo año, mi amigo me incentivó para que fuera para allá a probar con el ski en dicha escuela.
¿Pero tu estabas estudiando o trabajando en ese tiempo?
Yo tenía mi trabajo estable en mi ciudad, trabajaba como soldador. De hecho tengo mucha experiencia en el rubro. Tengo mi propia Pyme aquí en Chile de soldadura y hecho muchos trabajos acá. Es algo que también me gusta mucho. Así llegué a La Escuela.
¿Cómo fue llegar a aprender sobre el ski?
Yo era el único que no venía de una rama de ski, de una universidad, ni de nada relacionado a la enseñanza del ski. Nos presentamos 40 a la prueba, la pasamos unos 20. Esos 20 realizamos el curso de Pre formación. Al cabo de un tiempo solo quedamos 10 y al final de la temporada quedamos 2 ó 3 compañeros los cuales pasaron a ser grandes amigos. Esa temporada aprendí mucho. Al año siguiente que ya quería dedicarme más profesionalmente, me titulé como técnico deportivo de ski nivel 1. Me fue muy bien y dos años después saqué el nivel 2, para finalmente a los 4 años sacar el nivel 3 de Entrenador Nacional.
¿Entonces además de instructor fuiste entrenador?
Sí, después de sacar el nivel 3, comencé a entrenar a distintos clubes de Sierra Nevada.
Tuviste un avance bien rápido…
La verdad que sí. Con mucho interés, perseverancia, y de doblarle la mano al destino en varias ocasiones. Cuando comencé hace unos 25 años, el ski era muy elitista. Que llegara yo, de una familia humilde, con muchas habilidades deportivas y sin bagaje anterior a este mundillo fue bien complicado pero lo conseguí.
¿Cómo llegaste a Chile?
Después de unos 5 años, conversamos con varios amigos ya que todos queríamos seguir esquiando, y decidimos hacer doble temporada. La opción era o Chile o Argentina. Decidimos Chile porque se ganaba más dinero. Así para acá nos vinimos.
¿Directo a Farellones?
Cuando llegamos no conocíamos nada. Alquilamos un transfer para que nos subiera a la Cordillera, no sabíamos donde estaba nada de nada. Nos vinimos “a la aventura”. Cuando llegamos a Farellones buscamos un hostal y al día siguiente encontramos una casa donde quedarnos, y salimos a buscar trabajo. Adonde caminé primero fue a Farellones, ahí encontré a Francisco Cortés, quien era el dueño del Restaurant El Montañes y Director de la Escuela de Farellones. Le pedimos trabajo y nos aceptó de inmediato, y así a los 5 minutos de mi segundo día, ya tenía trabajo. Al principio pensé en ir a La Parva, El Colorado o Valle Nevado, pero no me quise complicar. Como todavía faltaba para comenzar la temporada y ya tenía trabajo, bajé a Santiago para conocer la ciudad. Después de 2 o 3 semanas cayó la primera nevada y tuvimos que subir a trabajar a Farellones.
¿Cómo fue esa primera temporada?
Había mucha nieve pero a Farellones le faltaba todavía mucha coordinación para que todo funcionara bien en todos los ámbitos. Era como el patio de atrás de El Colorado y por eso no se potenciaba tanto. Al finalizar esa temporada, esquié mucho pero económicamente no fue muy bueno. Me dije “el próximo año no vuelvo…”, pero al año siguiente no me resistí y volví a venir.
¿Cómo estuvo esa segunda temporada?
Fue un poco mejor que la anterior, pero acá lo que marcó la diferencia fue que como yo tenía el nivel 3, y mi especialización fue gestión deportiva, quería desarrollar ideas aunque fuera gratis. Me daba lo mismo. Así organicé una carrera inter escuelas de todos los centros de ski de la zona central. Yo hice todo ahí: producción, marketing, comunicación con las escuelas, marqué yo la pista, corrí, etc. Me ayudó mucho Jorge Sapunar de La Parva. Hicimos una fiesta de cierre de la carrera en El Montañés donde se entregaron los premios. Después de esa carrera y con mi nivel 3, me comenzaron a ofrecer algunos trabajos en distintos centros de ski. Algunos buenos puestos.
¿No pensaste en cambiar de centro y dejar Farellones?
En ese mismo tiempo Francisco Cortés me había ofrecido ser el Subdirector de La Escuela de ski de Farellones para ordenarla y reimpulsarla. O me iba a un centro de ski más grande y más desarrollado pero en un puesto menor, o me quedaba en Farellones. Recuerdo un dicho de un amigo: “Más vale ser cabeza de ratón que cola de león”. Además me atraía mucho el tema de mejorar la coordinación y organización de Farellones, por lo que me quedé.
¿Y Cómo resultó?
Muy bien. Al año siguiente se triplicaron las ventas.
Cuando acababa la temporada en Chile ¿volvías a España?
Sí. Hacía doble temporada en Sierra Nevada y regresaba a Chile con el cargo de Subdirector de la Escuela de Farellones.
¿Qué pasó luego?
Los años siguientes nos fue muy bien. Las ventas tuvieron un crecimiento exponencial. Los profesores ganaban buenos sueldos y ya muchos que preferían trabajar en Farellones que en otros centros de ski cercanos.
¿Cuando decides radicarte en Chile?
Después de 6 años haciendo doble temporada y con novia en Santiago, decidí quedarme en Chile.
¿Y Seguiste en Farellones?
Sí, seguí pero con los años la concesión de la Escuela de Farellones dejó de ser de Francisco Cortés y pasó a gestionarla Andacor S.A. , la empresa madre que tiene El Colorado, Parque de Farellones y ahora el centro de ski de Pucón. En ese tiempo Peter Leatherbee, me ofreció la oportunidad que yo gestionara los rentals y las escuelas de Farellones. Por suerte también ese año, logramos que las ventas se dispararan de una forma más exponencial todavía.
¿Después de Farellones vino El Colorado?
No, después de ser Director de la escuela y rental de Farellones pasé a Director de Parques de Farellones. De todas las actividades non ski, de las escuelas, de los rentals. De toda la coordinación general del Parque. Ahí también comenzamos con el plan de verano. Lo que tiene que ver con los bikeparks
¿Y Ahora?
Ahora soy el Director de Servicios de Andacor. Esto significa estoy encargado de todo lo que tiene que ver con la operación de cada cliente, ya sea en restaurantes, escuelas, ski, no ski. También estoy encargado de la generación de nuevos centros como el de Pucón. Soy el gerente a cargo de llevar a cabo el proyecto de ese centro. Estoy muy contento. Siempre enlazado al mundo de la nieve. Al inicio de una forma un poco casual. Esquié, corrí, entrené mucho. Con los años me he fui haciendo más amante de la montaña durante todo el año. Hago mucha bicicleta Enduro en verano y ski en invierno.
Dejar en condiciones el centro de ski Pucón es un gran desafío. ¿qué nos puedes comentar?
El próximo invierno esperamos estar abriendo como centro de ski. La idea es hacer un centro de montaña que sea una mezcla entre El Colorado y Farellones con actividades durante todo el año.
¿Osea en invierno no solo habrá ski?
No solo ski. Las personas que no esquían tendrán un gran espacio con un parque de entretenciones en la nieve, y en el verano queremos impulsar al igual que acá, las bicicletas, los trekking, los canopy, que tengamos productos entretenidos para que las familias, grupos, parejas, bikers, los que suben al volcán, vayan y lo pasen bien. Es importante entender las diferencias de culturas y clientes que hay en Pucón. Nos estamos adaptando al modelo de negocio de ahí que es distinto al de acá. Es un desafío muy interesante. Por suerte contamos con el equipo que ha trabajado en el centro de ski por 20 años. Estoy muy contento con este desafío.
Mirando para atrás ¿ en qué momento decidiste que la nieve sería lo tuyo?
Cuando saqué el nivel 1. En ese momento decidí dedicarme profesionalmente a la nieve. No sabía si lo iba a conseguir pues es difícil por el tema de la estacionalidad, pero cuando ví que era alcanzable, me dije : “esto es lo mío”. Por supuesto que fui compatibilizando las temporadas con otros trabajos, y con el tiempo me pude dedicar en un 100% a la gestión de montaña.
¿Tu familia como tomó que quisieras trabajar en la nieve?
Mal, ya que en mi familia nadie esquía, cero relación con la nieve. Para ellos era una locura. Palencia es una ciudad pequeña que tiene su propia industria y campos. Y la gente se dedica a lo mismo en la misma ciudad. Entonces que una persona de ahí salga, se dedique al ski, se vaya a Chile, haya terminado dedicándose profesionalmente al ski y haya llegado a trabajar durante todo el año a una empresa como Andacor, desarrollando distintos negocios de importancia. Es algo raro para ellos. De hecho al comienzo les costó mucho aceptarlo y estaban muy en contra pues yo tenía mi trabajo fijo en Palencia.
Analizando tu carrera, ¿qué sería lo que más te ha marcado?
Cuando decidí quedarme en Farellones y no irme a un centro más grande o desarrollado, eso me marcó. Fue una decisión acertada que requirió mucho más trabajo y esfuerzo, pero fue un punto de quiebre para mi.
¿Alguna anécdota que puedas contarnos?
Pues todo lo que te he contado aquí es como una gran anécdota. Para mi es un viaje de vida al que llegué por casualidad. Igual te puedo contar una historia. El último año que trabajé para Francisco Cortés en Farellones, queríamos implantar un software de escuela, que era el mismo que ocupaban en la Escuela de El Colorado. La escuela de Farellones no dependía de El Colorado, pero si necesitábamos la ayuda de la tecnología que ocupaban allá. El asunto es que el software solo se pudo implementar a ultima hora, y eran las 3 de la mañana del día en que comenzaba la temporada y el software no funcionaba porque la conexión a internet en ese tiempo era mala. Estaba vuelto loco tratando de que funcionara. En ese momento aparece Peter Leatherbee, que era el Gerente General de Andacor, pero yo no lo conocía. Me preguntó quien era yo, y le expliqué que era el subdirector de la Escuela de Farellones y que estaba intentando que el software funcionara. Al final no hubo caso y no se pudo hacer funcionar el software, pero fue el momento en que a las 3 de la madrugada conocí al Gerente General.
¿Cuál es tu centro de ski favorito?
No es por ser partidista, pero la mejor nieve que he encontrado ha sido en El Colorado. Por la orientación, por cómo se trabaja la nieve. Tiene una calidad de nieve muy diferente a los otros centros. Además el powder de El Colorado es muy bueno y el tiempo que se mantiene. La verdad El Colorado a mi me sorprendió, al ver como está desarrollado considerando también que es una empresa familiar que lleva 70 años.
¿Lentes o antiparras?
Antiparras
¿Pista o fuera de pista?
Pista
¿Cuál es tu pista favorita en El Colorado?
A mi que me gusta la competición , mi favorita es El León, pues te permite carvear de la mejor forma posible. Además subes y bajas rápido, la inclinación y el ancho es bueno, y para lo que es el ski en pista es muy rica.
¿Y Si hay powder adónde vas en El Colorado?
"Chanchitos" sin duda.
¿Cual es tu centro de ski preferido en España?
Sierra Nevada, aunque me gusta mucho también Cerler, que es un centro de ski del Norte. Mas pequeño y metido en un valle que es muy bonito. El pueblo es bonito y se esquía entre árboles. Sierra nevada destaca por cómo está desarrollado el modelo de negocio. Cuenta con un pueblo en la misma estación que tiene todos los servicios, con muchos edificios, hotelería, clínicas, restaurantes, comercios y está diseñado para que el cliente lo pase bien. El apreski es buenísimo también. Sierra Nevada está en Andalucía y los andaluces son buenos para pasarlo bien, y ese centro está impregnado de esa cultura, por lo que se pasa muy bien esquiando, y después de esquiar también lo pasas bien. Hay muy buenos sitios para alojar, para comer. Es uno de esos lugares que puedes recomendar en España para ir de vacaciones, y sin duda quedarás satisfecho.
¿Por qué los chilenos deberían preferir a El Colorado?
Primero porque tiene la mejor nieve. Somos una empresa con más de 70 años de experiencia, por lo que sabemos trabajar la nieve, sabemos generar la diversión y los servicios necesarios para que el cliente se sienta bien. Además El Colorado es el centro de los santiaguinos. Nosotros estamos haciendo el mejor esfuerzo para que vengan los esquiadores, para que tengamos los mejores servicios disponibles, tener la nieve muy bien pisada, y los fuera de pistas como corresponden. El esfuerzo que se está haciendo para retomar todo después de la pandemia es muy grande, con mucho esfuerzo humano. El Colorado “la lleva”
¿Dónde estará Mike Izquierdo en 10 años más?
Para mi el trabajo en Andacor es un proyecto de vida. Durante todos estos años he seguido teniendo ofertas para trabajar en otros centros pero me quedo en Andacor. A menos que haya algún vuelco importante en mi vida que me haga volver a España, pero por ahora no está en mis planes. Estoy radicado completamente en Chile, tengo mi casa y todo acá, y quiero seguir en Andacor.
